El origen indio del acero

Si alguna vez has pensado en realizar un corte láser en Madrid centro, específicamente en acero, puede que te sorprenda saber que los orígenes de este material se remontan a tierras asiáticas, concretamente a la India.

Se tiene constancia de que ya en el año 3000 a. C. en Egipto ya se había forjado el hierro, aunque no se le puede llamar como el acero que hoy en día conocemos. En la actualidad, se ha desarrollado esta técnica, como prueba el gran desarrollo de establecimientos de corte láser en Madrid centro.

Muchas veces, estos primeros forjadores formaban acero, pues en el método de forja del hierro se utilizaba carbón vegetal y podía terminar creándose casi por casualidad.

Ya en el año 200 a. C., aproximadamente, el subcontinente indio se especializó en la técnica que radica en calentar a una temperatura alta, en hornos con tiro forzado, piezas de hierro carbonado en una cavidad de arcilla.

Este método ayudaba a que la distribución del carbono pudiera ser más similar en el hierro, de forma que el metal que obtuvieras fuera más resistente.

Esta técnica del crisol se transformó hasta llegar al conocido como acero wooz, el cual se formaba con vidrio, en su mezcla para llegar a atrapar las impurezas y lograrlas así retirar, obteniendo como consecuencia un acero más puro.

Su reconocimiento mundial fue indiscutible y se exportó a distintas zonas, destacando Oriente Medio, donde era conocida como acero de Damasco.

A lo largo de siglos, fue la técnica más completa de fabricar acero. Así que ya sabes, la próxima vez que te encuentres con una lámina de acero que sea cortada al láser, recuerda el largo proceso de evolución de este metal que se inició en la India.

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